El Gobierno de EE UU estudia restringir más el acceso de China a los transistores GAA y la memoria HBM

Según fuentes familiarizadas con el asunto y recogidas por Bloomberg, la administración Biden está considerando imponer nuevos controles a la exportación para limitar la capacidad de China de adquirir tecnologías avanzadas de semiconductores cruciales para el desarrollo de sistemas de IA. La tecnología de transistores Gate-all-around (GAA) y los chips de memoria de gran ancho de banda (HBM) están en el centro de las restricciones propuestas. Estos componentes de vanguardia desempeñan un papel fundamental en la creación de potentes aceleradores de IA. Los transistores GAA, clave en los chips de nueva generación, prometen mejoras sustanciales en eficiencia energética y velocidad de procesamiento. Por su parte, los chips HBM permiten la transferencia de datos a alta velocidad entre el procesador y la memoria. Aunque las sanciones vigentes impiden a las empresas estadounidenses suministrar a las chinas equipos para fabricar chips de vanguardia, persiste la preocupación de que China pueda alcanzar capacidades avanzadas por otros medios.

Por ejemplo, el principal fabricante de chips chino, SMIC, podría integrar transistores GAA en su actual nodo de proceso de 7 nm, lo que mejoraría notablemente el rendimiento. El acceso a HBM aumentaría aún más la capacidad de China para desarrollar aceleradores de IA a la par de las ofertas de vanguardia de las empresas estadounidenses. Las reflexiones en el seno de la administración Biden muestran un esfuerzo estratégico por preservar la ventaja tecnológica de Estados Unidos negando a China el acceso a innovaciones clave en semiconductores. Sin embargo, la aplicación de controles de exportación tan estrictos es un acto de equilibrio delicado, ya que corre el riesgo de aumentar las tensiones y provocar represalias chinas. Aún no se ha tomado una decisión definitiva, y los funcionarios siguen sopesando los pros y los contras de las restricciones propuestas. No obstante, los debates ponen de relieve el papel fundamental que desempeña la tecnología de semiconductores en la rivalidad entre las grandes potencias, EE.UU. y China, especialmente en la era de la inteligencia artificial.

Fuente: Bloomberg